LAS PALABRAS
A la tardecita bajan
Por la cuesta las palabras
Se juntan y se dispersan
Como majada de cabras
Allá vienen en tropel
Todas juntas y mezcladas
Las palabras buenas
Las palabras malas.
Las palabras duras
Las palabras blandas
Palabras que solo duran
Palabras que uno ama
Palabras que han sido
Palabras que están siendo
Palabras que aun perduran
Y que solo son viento
Vienen entreveradas
Mansas, tiernas, delirantes
agresivas, desconfiadas
sencillas y elegantes
Algunas son muy viejas
Y con herrumbre de siglos...
(se llenaron de asperezas
encerradas en los libros)
Hay palabras seductoras
Atractivas, cautivantes
Palabras que enamoran
Al ingenuo caminante
Las hay otras indomables
que mis amigas han sido:
saben ser como sables
y de mi mano han comido
Es bueno ser prudente
con algunas palabras
que al cándido muerden
y le dejan la rabia
Y cuando el hombre se creé
propietario de la ciencia
endurece las palabras
y las tira como piedras
(Aprendí de la experiencia.
en mi infancia escolar
por estos dueños de la ciencia....
el arte de esquivar)
Esa gente también tiene
un tropel de palabritas
limpias, gordas, relucientes
y bien enceraditas
palabras que no oyen
palabras que no hablan
palabras que no viven
palabras que descartan
palabras con sobrepeso
o palabras muy santas
palabras hechas de yeso
¡para engañar al alma!
Las palabras están vivas
aunque parezca que miento
ellas son las divas
y nosotros su instrumento
Nombran lo nuevo
Hablan de lo viejo
Para que yo me mire
En ese espejo
Las palabras verdes
que cultivo en el jardín
se dicen despacito
para que no llegue el fin
Las palabras bravas
que señalan la tensión
aunque se hagan las mansas
dicen ¡revolución!
y las palabras suaves
que me calman el dolor
las puede decir cualquiera
pero si es Mari, mejor.
Y hay palabras perdidas
Que yo quisiera encontrar
Que se llenan de paciencia
Y se ponen a hilar
Palabras muy sentidas
De la majada mejor
Palabras elegidas
Para la voz de un cantor
Juan Ricci, Navidad del 2009
A la tardecita bajan
Por la cuesta las palabras
Se juntan y se dispersan
Como majada de cabras
Allá vienen en tropel
Todas juntas y mezcladas
Las palabras buenas
Las palabras malas.
Las palabras duras
Las palabras blandas
Palabras que solo duran
Palabras que uno ama
Palabras que han sido
Palabras que están siendo
Palabras que aun perduran
Y que solo son viento
Vienen entreveradas
Mansas, tiernas, delirantes
agresivas, desconfiadas
sencillas y elegantes
Algunas son muy viejas
Y con herrumbre de siglos...
(se llenaron de asperezas
encerradas en los libros)
Hay palabras seductoras
Atractivas, cautivantes
Palabras que enamoran
Al ingenuo caminante
Las hay otras indomables
que mis amigas han sido:
saben ser como sables
y de mi mano han comido
Es bueno ser prudente
con algunas palabras
que al cándido muerden
y le dejan la rabia
Y cuando el hombre se creé
propietario de la ciencia
endurece las palabras
y las tira como piedras
(Aprendí de la experiencia.
en mi infancia escolar
por estos dueños de la ciencia....
el arte de esquivar)
Esa gente también tiene
un tropel de palabritas
limpias, gordas, relucientes
y bien enceraditas
palabras que no oyen
palabras que no hablan
palabras que no viven
palabras que descartan
palabras con sobrepeso
o palabras muy santas
palabras hechas de yeso
¡para engañar al alma!
Las palabras están vivas
aunque parezca que miento
ellas son las divas
y nosotros su instrumento
Nombran lo nuevo
Hablan de lo viejo
Para que yo me mire
En ese espejo
Las palabras verdes
que cultivo en el jardín
se dicen despacito
para que no llegue el fin
Las palabras bravas
que señalan la tensión
aunque se hagan las mansas
dicen ¡revolución!
y las palabras suaves
que me calman el dolor
las puede decir cualquiera
pero si es Mari, mejor.
Y hay palabras perdidas
Que yo quisiera encontrar
Que se llenan de paciencia
Y se ponen a hilar
Palabras muy sentidas
De la majada mejor
Palabras elegidas
Para la voz de un cantor
Juan Ricci, Navidad del 2009